Los incendios forestales son fenómenos de origen natural o antrópico generalizados en todo el territorio. El riesgo de incendio es un tema prioritario en todo el mundo por su incremento en frecuencia, severidad y duración. Este riesgo provoca anualmente grandes pérdidas de masas forestales y constituye, hoy en día, una de las principales causas de degradación de los espacios forestales y de los ecosistemas, además de pérdidas materiales y personales.
En la Europa Mediterráneo y, por contexto geográfico, en las Islas Baleares, el peligro de estos fenómenos se ve fomentado principalmente por:

  1. Mayor propensión a ser más intensos y severos. Hay más combustible en el territorio debido al abandono de la agricultura y aumento de la superficie forestal. Además, el cambio climático provoca altas temperaturas de manera prolongada y condiciones más secas en general, causando estrés hídrico en la vegetación y aumentando su inflamabilidad y la temporada de incendios.
  2. Incremento de la recurrencia. El aumento de la urbanización en zonas genera una interacción de conductas humanas urbanas al entorno forestal que puede acontecer a menudo en negligencias (ex: ausencia de perímetros de seguridad, carencia de gestión, uso inadecuado del fuego), aumentando el número de incidentes relacionados con el fuego.


El uso del suelo y los cambios de cobertura terrestre son un claro factor que tiende a incrementar la carga de combustible y la continuidad del paisaje forestal, aumentando la probabilidad de incendios. En relación con la evolución de la cubierta forestal en las islas Baleares, si se comparan los datos del Primer Inventario Nacional Forestal (1970) con las del Quart Inventario Nacional Forestal (2012), se produce un aumento de superficie forestal de más del 25%, un 73% más de terreno forestal arbolado, alrededor de 115 millones de árboles más, y se ha duplicado el volumen de madera con corteza en el bosque.

En relación con la evolución de la cubierta forestal en las islas Baleares, si se comparan los datos del Primer Inventario Nacional Forestal (1970) con las del Cuarto Inventario Nacional Forestal (2012), se produce un aumento de superficie forestal de más del 25%, un 73% más de terreno forestal arbolado, alrededor de 115 millones de árboles más, y se ha duplicado el volumen de madera con corteza en el bosque.

Por estos motivos, es del todo perentorio que los municipios de las islas Baleares implementen los planes de actuación municipales y los planes de autoprotección municipales, los cuales son vitales para conseguir la eficacia de los sistemas de alerta temprana a la vez que la concienciación de la población.

OBJETIVOS

  1. Identificar y evaluar las zonas susceptibles de sufrir un incendio forestal en uso de técnicas de análisis espacial multicriterio que partan de diferentes fuentes de datos de usos y coberturas del suelo, estado de la vegetación y presencia de infraestructuras antrópicas como base, y se los incorporen los factores meteorológicos en tiempo real, obtenidos de las estaciones meteorológicas instaladas para determinar la evolución del riesgo.
  2. Generar y/o adaptar la cartografía de usos y coberturas del suelo, así como el estado de la vegetación, procedentes de diferentes fuentes de datos o mediante técnicas de teledetección.
  3. Compilar cartografía de infraestructuras antrópicas e identificar las zonas de interfase urbano-forestal.
  4. Seleccionar un método de interpolación para las variables meteorológicas y determinación de un método de análisis espacial multicriterio para el cálculo del riesgo a partir de los datos obtenidos en las actividades.
  5. Representar los resultados de vulnerabilidad en tiempo real en una escala espacial y temporal adecuada para el ámbito de estudio y las variables de entrada utilizadas.
  6. Seguimiento en tiempo real al visor de los datos observados e índices calculados relevantes por este riesgo.
  7. Cartografía actualizada sobre el estado actual de la vegetación de las masas forestales, a partir de la utilización de datos de índices empleados de manera habitual, como NDVI o LAI.
  8. Cartografía diaria y horaria de pronóstico de riesgo de incendio forestal, tanto a escala municipal como escala de masa forestal continua, a partir de uno o varios índices empleados de manera habitual, como por ejemplo el FWI, o el conocido como 30/30/30.
  9. Integración de productos del European Forest Fire Information System (EFFIS).